La Pastoral Educativa como pilar de la formación integral

La pastoral educativa es la manifestación viva de la misión de la Iglesia

El congreso fue inaugurado por el Obispo Alberto Lorenzelli, Presidente del Área de Educación de la Conferencia Episcopal de Chile, quien abordó el papel central de la pastoral educativa en la formación integral. Señaló que la pastoral no es simplemente un conjunto de actividades religiosas, sino el núcleo que anima la vida educativa en las escuelas católicas: “Es, en su esencia, el corazón que late al ritmo del Evangelio, que inspira, orienta y transforma cada aspecto de la vida escolar. La pastoral educativa, en su sentido más profundo, es la manifestación viva de la misión de la lglesia en el ámbito educativo: acompañar a cada estudiante en su camino de crecimiento, no solo en el conocimiento, sino también en su vida espiritual y moral”.

"La pastoral educativa es la manifestación viva de la misión de la Iglesia: acompañar a cada estudiante en su camino de crecimiento no solo académico, sino espiritual y moral", afirmó el obispo Lorenzelli.También, el obispo subrayó que la pastoral educativa debe guiar y dar coherencia a todo el proyecto educativo, asegurando que la formación académica y espiritual caminen juntas.

La educación cristiana no solo debe iluminar las mentes, sino también los corazones

Por su parte, Mons. Giuseppe Silvestrini, encargado de negocios de la nunciatura apostólica en Chile, subrayó la importancia de la educación católica como un proceso integral que va más allá de la mera instrucción intelectual. En su discurso, Mons. Silvestrini destacó la relevancia de formar a personas que vivan los valores del Evangelio, inspirados por Jesucristo, en un mundo necesitado de justicia y solidaridad. "La educación cristiana no solo debe iluminar las mentes, sino también los corazones”, para que los jóvenes sean capaces de discernir el bien y vivir conforme a la fe, enfatizó.

Mons. Silvestrini destacó la necesidad de preparar a los jóvenes para que sean protagonistas activos en una sociedad que se construya sobre valores arraigados en la fe. “Este Congreso nos ofrece la oportunidad de reflexionar juntos sobre cómo enfrentar desde el ámbito de la educación católica a los múltiples desafíos del presente y los que nos esperan, no solo en Chile sino a nivel global. Menciono solo algunos de estos desafíos: desde la secularización, la indiferencia religiosa, hasta el urgente cuidado de nuestra Casa Común, el desafío de avanzar hacia una economía que realmente tenga al centro al ser humano disminuyendo así la brecha de la pobreza que todavía hoy afecta a tantos hermanos en el mundo”.

La educación católica es una invitación a asumir un estilo de vida coherente con el Evangelio

En el marco del congreso, el Arzobispo René Rebolledo, presidente de la Conferencia Episcopal de Chile, presidió una misa en la que destacó la bondad y misericordia del Señor, recordando el llamado a la comunidad educativa a ser verdaderos "peregrinos de la esperanza". En su mensaje el Arzobispo Rebolledo utilizó los textos bíblicos del día para invitar a los presentes a vivir en la novedad que Cristo trae consigo, destacando la comparación evangélica del vino nuevo en odres nuevos como símbolo de la transformación radical que la educación católica debe generar en sus estudiantes.

"La educación católica no es simplemente transmitir conocimientos, sino una invitación a asumir un estilo de vida coherente con los valores del Evangelio", afirmó Rebolledo. Asimismo, señaló que la labor educativa debe ir más allá de la formación intelectual, promoviendo una integración plena de la dimensión espiritual y moral de los estudiantes, quienes son llamados a ser protagonistas de una sociedad más justa y solidaria. Además, el pastor recordó a los presentes que "encomendar al Señor nuestro camino y confiar en Él" es la clave para superar los desafíos y mantener viva la esperanza en el futuro.

La mirada de algunos participantes

Elizabeth Vega, coordinadora de pastoral del Colegio Corazón de María, subraya la importancia de la pastoral educativa en la formación integral de los jóvenes. Destaca que la pastoral debe estar en el centro de la gestión educativa, reflejándose en acciones concretas y en todas las áreas del colegio, especialmente en instituciones católicas. “Creo que es fundamental que nos podamos reunir a reflexionar sobre la importancia de una pastoral educativa en la formación integral de los jóvenes, porque sabemos desde el modelo de escuela católica que la pastoral está en el corazón de la gestión educativa”, señala Elizabeth valorando “que podamos hacer una síntesis de cuál es realmente esa implicancia que tiene lo pastoral en la gestión de todos los colegios y en la formación integral de los jóvenes, para que ojalá siempre en nuestros colegios -principalmente católicos- la centralidad esté en Jesucristo, que aprendamos de su pedagogía y que de ahí se desprendan todas las iniciativas que llevan adelante los colegios principalmente de inspiración católica o confesional”.

Por su parte, Santiago Amurrio, representante de los Colegios de La Salle en Chile, manifestó que la formación integral y la pastoral educativa son fundamentales para ayudar a los jóvenes a descubrir el sentido de su vida, integrar su proyecto educativo y contribuir a un mundo más humano: “Nosotros como formadores de jóvenes y de niños y de niñas queremos ayudarles a descubrir cuál es el sentido de su vida y de qué manera Dios puede estar presente y debe estar presente en sus decisiones”, destacó Amurrio, añadiendo que “nosotros ayudamos a que puedan ir construyendo un proyecto educativo que implica la integralidad de los procesos, una formación espiritual, una formación intelectual, una formación artística donde se integren los procesos que tienen que ver con el desarrollo de su proyecto personal de vida”. Relevó también que “estamos invitando a transformar el mundo, a hacer un mundo mejor, a construir un mundo más humano. Y desde esa perspectiva, la pastoral y el mensaje de Jesucristo nos ayuda a tener claridad de cómo incorporar e integrar fe, cultura y vida en los procesos que tienen que ver con los elementos pastorales y educativos

El congreso contó con paneles de conversación con la participación de Óscar Pérez Sayago, Secretario General Confederación Interamericana de Educación Católica; Luz María Budge Carvallo, Presidenta del Consejo Nacional de Educación; y Marcelo Neira, Director Área de Incidencia y Estudios Delegación para la Educación Santiago. Durante la jornada, los diversos panelistas coincidieron en que los desafíos actuales, como la secularización y la creciente indiferencia religiosa, exigen una respuesta creativa y valiente por parte de la comunidad educativa católica.

Luego, en el espacio de la tarde del Congreso, los asistentes a través de la técnica del “workshop” pudieron diseñar una propuesta concreta, a partir de la experiencia de cada uno en cuatro ámbitos a elección: el diálogo entre fe y cultura en la gestión curricular; las celebraciones litúrgicas y el vínculo con la propuesta educativa del colegio; el propiciar que los estudiantes realicen una síntesis creyente de sus aprendizajes; y las mediaciones pastorales en los procesos educativos del colegio.

En un contexto mundial marcado por crisis sociales, ecológicas y económicas, el congreso brindó un espacio para reflexionar tambien sobre cómo la educación católica puede contribuir a la construcción de un mundo más justo y solidario.

El Congreso fue una oportunidad para proyectar con un mensaje de esperanza y compromiso, invitando a los educadores a ser testigos de la alegría del Evangelio y a seguir acompañando a las nuevas generaciones en su crecimiento integral, inspirados por el amor y la vida de Jesucristo.